La Intolerancia a la Lactosa, es una enfermedad que afecta a 2 de cada 10 personas, saber cómo funciona la enzima lactasa, y como funciona ésta, es la clave para tratar esta enfermedad, al nacer tenemos altos índices de esta enzima en nuestro organismo, producida por las células del intestino delgado, sin embargo, a medida que vamos envejeciendo, cada vez éstas células producen menos y menos lactasa, a medida que éstos niveles disminuyen su producción van apareciendo los síntomas de la intolerancia a la lactosa y aumentan su gravedad con el pasar del tiempo.
Los alimentos que contienen lactosa no se limitan solo a los lácteos como: leche, quesos, requesón, nata o mantequilla, podemos encontrar lácteos en medicamentos en los que son utilizado como relleno, en alimentos procesados, carnes procesadas, salchichas, cereales, patatas fritas etc.
Los síntomas de la intolerancia a lactosa son principalmente digestivos y consisten en:
Gases, Hinchazón, Diarrea, Nauseas, Dolor de Cabeza, entre otros
¿Deberías renunciar a los lácteos?
- La Lactosa, está presente en todo tipo de alimentos que usted nunca sospecharía que contienen lactosa. Así que inconscientemente consumen alimentos que provocan síntomas de intolerancia a la lactosa.
- Una de las mejores maneras de asegurarse de que está recibiendo las cantidades recomendadas de nutrientes para la construcción de huesos, es a través de productos lácteos. Restringir su dieta de lácteos por ser intolerante a la lactosa es perder otro gran número de nutrientes presentes en estos.
Alternativas a los lácteos
Hay una gran variedad de formas de controlar los síntomas de la intolerancia a la lactosa en la vida del paciente. Estos incluyen cambios en la dieta, es decir, consumir alimentos sin lactosa, los suplementos, las tabletas de lactasa y adaptación a la lactosa. Cuando una persona hace un cambio significativo en su dieta, como cortar los alimentos que contienen lactosa, debe consultar con su médico de manera tal de asegurarse que está consumiendo cantidades correctas de calcio y vitamina D en su dieta. La deficiencia de vitamina D puede resultar en debilidad ósea en adultos y deformidad ósea en los niños. Si la intolerancia a la lactosa no se trata, y la persona sigue comiendo alimentos con lactosa, o corta la lactosa de la dieta, hay efectos a largo plazo que pueden dañar el cuerpo.
El futuro de los síntomas intolerantes a la lactosa parece positivo. Hay una investigación significativa en ésta área para encontrar una manera más fácil de controlar la intolerancia a la lactosa, incluyendo las pruebas en 1998 por los científicos. Se llevaron a cabo trasplante de terapia génica en ratas y esperamos adaptar esta técnica en los seres humanos en los próximos años.
Actualmente hay muchas alternativas para los que padecen intolerancia a la lactosa, muchos productos ya elaborados sustituyendola. En nuestra carta ya están disponibles alternativas para disfrutar de las zumos y batidos a pesar de padecer intolerancia a la lactosa, usamos helados y leche que permite hacer los mismos batidos pero sin lactosa. También nuestra carta de cocina se está modificando para poder llegar a todos los públicos. Consúltanos.